El país más pobre de latinoamérica. Un terremoto de la misma escala en Japón no hubiese tenido las devastadoras consecuencias que vivimos. Hoy, un aluvión de imágenes, la sociedad del espectáculo o de la transparencia remueve nuestras conciencias.

No voy a seguir enumerando las desgracias de lo que ha ocurrido, sabido por todos ya, pero sí quería dejaros esta original y oportuna alternativa para la ayuda económica que muchos de nosotros/as queremos prestar.

Los organizadores de CloudCamp for Haiti preparan una conferencia virtual para la semana próxima, usándola como medio para recaudar dinero para la gente de de Haití.

La conferencia no estaba pensada así, pero en vistas de lo ocurrido sus organizadores se centrarán en cómo la nube puede usarse en la recuperación de desastres en el mundo real, como en el caso de la ayuda humanitaria que prestemos a Haití.

El coste de atender es de $25 (tenéis en este enlace múltiples opciones de participación, podemos, si queremos ampliar nuestra ayuda, esponsorizar el evento con donaciones a partir de 50 dólares) y todas las donaciones se dedicarán a la recuperación del lugar.

Será ONLINE el próximo miércoles, desde las 11 a.m. EST (creo que las 16:00 en España) y durará unas tres horas.

Telefonía móvil y Cloud Computing (SaaS, X como servicio) eran dos de las tendencias de las que hablábamos para 2010. Nexus One, el teléfono móvil de Google, como dispositivo conectado a la nube, realmente basado en servicios, en datos de la web, con Apple tratando de seguir siendo competitivo y desarrollando su estructura también en la nube, son temas que van a contribuir aún más al desarrollo de ambos aspectos.

Habrá quien discuta la iniciativa, que puede ser tomada por oportunista. En el caso de El caparazón y desde la perspectiva de que deberá reconstruirse una pobreza que les ha resultado especialmente letal, ya hemos donado nuestra parte como sponsors del evento.

Supongo que porque la información me llegaba en el momento preciso,  a resolver la disonancia cognitiva que sufro desde hace unos días en torno a lo inmensamente desigual de este mundo.  Conectados pero ajenos a veces a una realidad que puede ser tan dura como la que podemos ver ahora, desde Google Earth, los múltiples servicios de redes sociales y otros afines al periodismo ciudadano que, como siempre, nos bombardea de imágenes.

Desde nuestra posición de geeks privilegiados/as estamos obligados/as a ayudar, en la mayor medida posible, a los que no cuentan con las tecnologías que a nosotros nos resuelven, en mucho, la vida.

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