Tenía ganas de hablaros de ello desde que Pedro Villarubia, educador y buen amigo virtual, me dejaba en Twitter un par de enlaces de interés. Se trata de un concepto que comentábamos hace un tiempo y que está siendo uno de los más relevantes durante 2009: La web en tiempo real.
Diría que la responsabilidad es casi exclusiva de Twitter pero podemos analizar, gracias a lecturas y reflexiones personales un poco más el tema. Así, comenta Nova Spivack que, como decíamos en la Presentación “Web 3.0, La tercera década de la web, el Stream supone un nuevo paso, una nueva metáfora en la evolución de la web.
Internet tiene algunas décadas más que la web. Y aunque hoy identifiquemos ambos términos, no es así:
La web es soportada por Internet como el software a los sistemas operativos de los equipos. Así, lo nuevo ahora sería el Lifestreaming, llamado más tarde web en tiempo real, Statusfera o lo que ahora Spivack denomina la corriente (The Stream).
Entorno a ello nacen múltiples herramientas, unas que a imagen y semejanza de Twitter, Facebook, Friendfeed, nos permiten dejar huellas inmediatas en la web y otras, derivadas de estas y de tecnologías como las de Sindicación y las más nuevas de open-source real-time technology (XMPP), permiten cosas como la “Búsqueda en tiempo real”, el filtrado de la información, su organización, seguir “Tendencias” o incluso predecir el futuro.
Incluso si el modelo de datos enlazados subyacente es como un grafo, incluso semántico, la experiencia de usuario será cada vez más orientada al stream.
Así, si la web está formada de sitios, páginas y links, el flujo está formado de corrientes de información, incluso, a través de APIs abiertas, de los datos que tanto importan a la interoperabilidad y coherencia de la web abierta que queremos y representa el gráfico inferior (Linked data web):
- Cambio, ámbitos de conocimiento
Los streams cambian a menudo y eso constituye parte de su valor. De hecho el cambio es su característica principal.
Eso distingue Streams (microblogging, blogs para Spivack) de otro tipo de web sites, colecciones estáticas de referencia, según, añadiría yo, entre otros factores, el ámbito de conocimiento, más o menos histórico o consensuado por la comunidad científica a que nos estemos refiriendo. Si hablamos de entornos que recogen datos prospectivos, de futuro, o de blogs que recogen informaciones en beta, conversación permanente, entonces el stream adquiere una importancia capital.
- La web en construcción permanente.
Aquí, la conversación lo es todo, con el RT (Retweets en Twitter) llegando incluso a superar en importancia al enlace como indicador cuantitativo de popularidad de las páginas.
El tema me recuerda en parte a Wolfram Alpha, definido oficialmente como herramienta de computación de conocimientos concretos, más que como motor de búsqueda. Aunque leáis que puede suponer una alternativa a Google, veréis si lo probáis y analizáis a fondo que se trata de algo muy distinto.
- Independencia de la Interface, Personalización:
Si en la era de la web era el proveedor el que controlaba la interface desde la que recibíamos los datos. en la nueva era, es el consumidor el que, haciendo uso de distintas herramientas de sistematización, de organización del flujo (lectores de feed, los Entornos personales de los que venimos hablando últimamente, la construye según sus propias necesidades o intereses.
Es una de las características que también destacábamos para la web 3.0 y el aprendizaje en Entornos Personales (Aprendizaje 3.0):
- Sobrecarga cognitiva:
El tema provoca varias reflexiones. A nivel de e-competencias, si todo es cada vez más conversacional, menos permanente, un requisito fundamental del flujo será la sincronicidad en la respuesta. O respondemos de forma inmediata, o lo hacemos de forma obsoleta, una vuelta de tuerca más al esfuerzo de interactuar con la información o una ubicuidad (telefonía móvil) cada vez más necesaria si no queremos quedarnos fuera de la corriente.
Visto en otros términos, nos dirigimos a un mundo de Inputs momentáneos, atención distribuida y fragmentada, viralidad efímera, momentos de celebridad, de visibilidad instantánea, que nos llegan a una velocidad inabarcable y que necesitarán, bien de la evolución rápida de nuestro sistema cognitivo, bien de la importancia absoluta de filtros que adapten esta nueva conciencia universal a las capacidades cognitivas humanas.
Se me ocurren varias reflexiones al respecto. ¿Alcanzaremos así de forma permanente el estado de Flujo de Mihaly Csikszentmihalyi que había de llevarnos a la felicidad?
¿Deberíamos acotar nuestros intereses? La metáfora de las 10.000 horas necesarias para ser excelentes en cuanto a conocimiento (los Outliers de Malcolm Gladwell) podría ser válida solamente de este modo. ¿Pero eso no nos limita, no limita la creatividad, la innovación?. ¿Será la colaboración la única y creciente solución al problema de la inabarcabilidad del conocimiento?
La sobrecarga cognitiva genera dudas, que no sólo nos afectan como humanos. Parece que a la gran compañía monopolista de la red, al propio Google, también le cuesta adaptarse al Stream:
Así, mientras el Gran Hermano de la red (lo digo en tono irónico y exagerado ;)) no suba al tren de la nueva tendencia, que reconoce oficialmente como una de sus debilidades, son otros quienes protagonizan el movimiento:
- Nuevas aplicaciones, Publicidad:
También afecta a nuevas formas de publicidad, de rentabilización de espacios: En una red orientada al Stream en la que podemos monitorizar la popularidad de cada cosa en cada momento, surgen nuevas oportunidades de monetización, basadas en precios mayores o rotación de anuncios para impresiones en las páginas más populares “en el momento actual”.
Y a nuevas aplicaciones, nuevas Startup que en 2009 nos ofrecen múltiples formas de gestión del Stream: Notify, Friendfeed, aplicaciones de escritorio o complementos del navegador para interactuar con Twittter o cualquier otro servicio de comunicación basada en el “status”.
- La mente, el espíritu global de la humanidad:
Difiero en este punto del razonamiento que sitúa internet como nuestro sistema nervioso colectivo, la web como nuestro cerebro (brain) colectivo y el stream como nuestra mente (mind) colectiva. O prefiero limitarlo al ámbito de la metáfora: El stream estaría representando, a nuestra imagen y semejanza, la mente, lo que el sistema está “pensando” en tiempo real. Creo que el salto es hoy arriesgado y aún poético cuando se afirma que la inteligencia planetaria podria estar suponiendo cualquier forma de conciencia independiente.
Pero lo que sí parece cierto es que de esa suma de conciencias, de contenidos, de informaciones generadas por milllones de usuarios y bajo el principio de que el todo es superior a la suma de las partes, podría estar emergiendo algo, no sólo más inteligente (como veíamos en Sabiduría de las multitudes) sinó también mucho más vivo y dinámico.
Soñemos….
Relacionados:
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Imágenes:
Slide from Tim Berners-Lee’s TED talk in Feb 09
Mcallan, Imaginación al poder.
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Hola Dolors, como siempre inspirador y, en esta ocasión, también con un punto de utopía… ¿nos permitirán las Administraciones, con su desinterés por la neutralidad tecnológica, o las empresas tecnólogicas, con sus intereses económicos como única (en muchas ocasiones) motivación, alcanzar esa inteligencia colectiva?
David…difícil, como bien comentas. Aunque mientras sigan ignorando la dinámica, el espíritu que fluye aquí en la web, no lo tenemos difícil. ¿Sabes? En su momento, cuando se planteaba el debate entre políticos en la red, me mostraba reacia: que no vengan aquí….
Visto lo visto, creo que sigo pensando lo mismo. Si se viene a cambiar las cosas para peor, mejor que se queden fuera.
Un abrazo
Por favor, ver mi artículo :
The Web as a Stream of Stories, Envisioned by Salman Rushdie